acá

Acá lo intimo se convierte en erótico, y ya hay más luces y las sombras quedan opacadas por los cuerpos que se rozan, que se tocan y se muerden. No hay palabras ni suspiros, quizás un poco de música, y el cabello te cubre los ojos y esa mirada tan falsa de sirena, con hermosos pezones puntiagudos, rosas, con pequeños pechos que se balancean pero sólo eso porque abajo hay escamas pero no importan porque el cine apto para gente decente sólo permite a tus hijos que vean sangre, muertos, accidentes, guerras, estafas, a lo sumo un pezón (aunque internet este plagado de hombres y mujeres que muestran sus encantos (y caí en el juego del lenguaje, del tabú y de no decir las cosas por su nombre) ).

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